Con la puesta en marcha en 1989 del proyecto de Investigación y Conservación del Ovino Criollo Mexicano por parte del Departamento de Zootecnia de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh), la institución educativa busca proveer de material genético a pequeños productores de las regiones más marginadas del país, y así brindar otras alternativas de alimentación.