De acuerdo con Rabobank, durante los últimos 12 meses las actividades enfocadas a la producción sostenible de carne de res han experimentado un incremento en cuanto a su presencia alrededor del mundo, mismas que han sido impulsadas mayormente por el sector comercial, donde se incluyen desde pequeños empresarios hasta compañías de talla internacional.
Un ejemplo de estas últimas, según la entidad financiera, es McDonald's, que está estudiando los estándares de aportación sostenible para sus 10 principales países proveedores de proteína de res, apegándose a los criterios de la Mesa Redonda Global para carne de vacuno Sostenible (GRSB).
Según la definición de la GRSB, la carne de res sostenible debe ser un producto socialmente responsable, ambientalmente racional y económicamente viable, que prioriza: el planeta, la población, los animales y el progreso.
Por su parte, la empresa cárnica Tyson cuenta con su propio programa de sostenibilidad del ganado llamado "Progressive Beef", el cual es verificado directamente por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).
Mientras que Cargill se comprometió a reducir 30% las emisiones de gases de efecto invernadero, provenientes de su cadena productiva de carne de res para 2030, objetivo que también tiene la firma Meat & Livestock Australia.
Fuente: agromeat.com